Productiva inversión
Por: Roberto L Rodriguez
Muchas veces pensamos que los para ganar una competencia selectiva debemos tener un ejemplar de cientos de miles de dólares. Monster Bea es una prueba contundente de que esta teoría no es garantizada y que, por lo contrario, en varias ocasiones han sido pequeñas inversiones las que han dado el mejor fruto. En la tarde del viernes 15 de julio se corrió el Oceanside Stakes en Del Mar en donde la victoria correspondió al castrado hijo de Hat Trick (JPN) Monster Bea por el que se pagó la módica suma de $2,000 en la subasta de ejemplares de un año de Fasig-Tipton Keeneland en el 2014.
Conducido a la perfección por el miembro del salón de la fama Gary Stevens, Monster Bea corrió entre las últimas posiciones en los primeros tres cuartos de milla del Oceanside Stakes donde Imperious One (IRE) y Mr. Roary marcaron el camino con parciales de :22.85, :46.34 y 1:11.77. Cuando se disponían a entrar en la recta de las emociones, los colores fucsia y negro de Gary Barber se hacían notar por la parte externa de la pista gracias a la sensacional atropellada de su consentido Monster Bea quien finalizó la milla en 1:35.93.
Con esta victoria el ejemplar entrenado por Peter Miller llega a tres en total con ganancias totales de $179,637 dejando claro que Monster Bea ha sido una productiva inversión.
Con esta victoria el ejemplar entrenado por Peter Miller llega a tres en total con ganancias totales de $179,637 dejando claro que Monster Bea ha sido una productiva inversión.