El mano a mano en el Unzué fue de Tirolesca
Hipismo Internacional – Argentina
Heroína del Gran Premio Maipú (G1, 1000m) en la arena durante la víspera, Tirolesca se trasladó a la grama de San Isidro en pos del Gran Premio Felix de Álzaga Unzué (G1, 1000m). Por primera vez en esa superficie, el rival a vencer era Sassagoula Springs, luminaria previa del Gran Premio Suipacha (G1) y absoluta dominadora de la grande norteña. El match se inclinó para la descendiente de Roman Ruler, con el aprendiz Franco Calvente en su cruz y la tutela de Germán Feliciani. Y acaso este impacto cristalice por completo lo que la convertirá campeona de la especialidad.
Eragon fue el mejor de un Anchorena espectacular
Parecía que el Gran Premio Joaquín S. de Anchorena (G1, 1600m) era de Al Green, que desbordó con autoridad al frenético líder y titular en la máxima escala Fantastic Four y tomó un cómodo margen de error. Empero, por ese desgaste prematuro, sintió el esfuerzo en los 200 finales. Desde la zaga, como producto de una conducción perfecta de Gustavo Calvente, emergió cual vendaval Eragon y sobre la meta soportó la estocada a la par de Life And Glory. El preparado por Roberto Pellegatta, después de tanto andar en la especialidad, le proporcionó el primer trofeo en la elite a la caballeriza Juan Antonio.
Hi Happy fue una sonrisa de consagración absoluta.
De campeón tres años seguro por sus lauros durante el proceso selectivo a dueño y señor del turf argentino. Con su atropellada de costumbre, Hi Happy se hizo fuerte sobre la recta final y no dejó ninguna duda en el telón del Gran Premio Carlos Pellegrini (G1). El antes héroe de los grandes premios 2000 Guineas (G1), Jockey Club (G1) y Nacional (G1) fue conducido sin fisuras por Altair Domingos y finalizó así con la foja inmaculada. Tanto para el jockey como para el entrenador Pedro Nickel, el reservado por el haras La Providencia fue el primer lauro en la prueba magna continental.