La influencia de los Jinetes Latinos
Esa misma temporada (1958) Valenzuela ganó el Preakness Stakes también con el ejemplar Tim Tam y terminó segundo en el Belmont detrás de Cavan. Anterior a “Milo” Valenzuela, el chileno Ruperto Donoso había ganado el Belmont Stakes con Phalanx en 1947, un ejemplar propiedad de la familia Whitney. Tendríamos que ir hasta el año de 1920, donde Joseph Rodriguez abordo de Upset finalizara segundo ante Man o’ War en el Preakness Stakes en 1920, temporada en la cual Rodriguez se convirtió en el primer jinete latino en la historia en competir en alguna de las 3 gemas que conforman la triple corona de la hípica de los Estados Unidos.
El panameño Braulio Baeza ganó la doble corona (Kentuck Derby y Belmont Stakes) con Chateaugay en 1963, anteriormente había ganado el conocido test de los campeones en 1961 con el ejemplar Sheluck. Tanto Valenzuela, como Ycaza y Baeza continuaron haciendo historia época de los 60 sobresaliendo entre los grandes en la mayoría de los eventos de mayor relevancia. Los famosos 70, era recordada por los triplecoronados Secretariat (73), Seattle Slew (77) y Affirmed (78), también ha jugado un papel importante a través de los años en lo que a jinetes latinos se refiere, el “invasor” venezolano Gustavo Ávila ganó el Kentucky Derby y Preakness Stakes de 1971 con Canonero II, mientras que el boricua Eddie Belmonte se llevó el Preakness del 70 con Personality. Para los fanáticos hípicos de habla hispana no fue solo una época llena de anécdotas e historias de proezas que contar, los años 70 así como los 80 también fueron los espacios del tiempo donde jinetes como Ángel Cordero Jr., Jacinto Vázquez, Jorge Velázquez y Laffit Pincay Jr. brillaran con luz propia fortaleciendo una escuela que hoy día continúa produciendo grandes atletas del sillín.
A pesar de que los jinetes latinos ganaron 7 de los 10 premios Eclipse entregados en los años 70, las cosas cambiaron en años posteriores, con la excepción de Ángel Cordero Jr. (1982-83), José Santos (1988) y Jorge Chávez (1999), el anhelado galardón correspondió a jinetes americanos entre los años 1980 y 1999 (20 temporadas), Chris McCarron (1980), Bill Shoemaker (1981), Pat Day (1984, 1986, 1987, 1991), Kent Desormeaux (1989 y 1992), Craig Perret (1990), Mike Smith (1993-94), Jerry Bailey (1995-97) y Gary Stevens en 1998. Sin embargo, desde el nuevo milenio, solo Jerry Bailey (2000-03) y el desaparecido Garrett Gomez (2007-08) han sido los representantes de Estados Unidos en ganar el premio Eclipse, el resto, ya sabemos esta parte de la historia.
Comenzando con el “maestro” John Velázquez hasta el nuevo miembro del salón del fama Javier Castellano, los jinetes latinos han tomado posesión de la gran mayoría de las estadísticas a nivel nacional, “JohnnyV” ganó el premio Eclipse en el 2004 y repitió en el 2005, luego el legendario jinete peruano Edgar Prado lo hizo en el 2006, solo el francés Julien Leparoux en el 2009 ha sido el único en ganar este importante trofeo representando al viejo continente, a partir de ese momento, un país conocido como la cuna de los grandes jinetes, me refiero a Venezuela, ha estado representada por dos extraordinarios profesionales quienes juntos han ganado los últimos siete campeonatos de forma consecutiva, el ya retirado Ramón Domínguez (2010-12) y Javier Castellano (2013-16), quien de paso tiene mucha oportunidad de repetir en este 2017.
Otro miembro del salón de la fama y jinete activo a quien podemos resaltar es Víctor Espinoza, el mexicano es hasta el momento el único latino en ganar la triple corona y también se convirtió en el primer jinete en la historia en triunfar en el Kentucky Derby, Preakness Stakes, Belmont Stakes y Breeders’ Cup Classic del mismo año cortesía de American Pharoah. Continuando con las carreras de la Triple Corona, desde el 2011 se han celebrado 21 de estas competencias (7 ediciones cada una), en 18 de ellas los jinetes ganadores son latinos.
Comenzando con Joseph Rodriguez en 1920, pasando por las temporadas de Baeza, Cordero Jr., Pincay Jr., Velázquez (Jorge y Johnny), siguiendo por la de Domínguez, Castellano, Rosario, Lezcano, Gutiérrez, Valdivia Jr., Alvarado, entre muchos otros, hasta los días de los hermanos Ortíz (Irad Jr. y José), Manuel Franco, Evin Román, Luis Sáez y las próximas generaciones, los jinetes latinos siguen estableciéndose en la cúspide mundial como los mejores dentro del deporte de los reyes.