CUANDO LOS MEDIOS ATACAN INCONSCIENTEMENTE A LA INDUSTRIA HÍPICA
Durante la emisión matutina de noticias de la cadena CNN, el estelar jinete John Velázquez fue entrevistado a raíz del desafortunado incidente ocurrido en la partida del Preakness Stakes (G1). Como es del conocimiento público, Bodexpress brincó hacia arriba al abrirse las puertas del aparato, haciendo que su jinete perdiera el balance y cayera irremediablemente a tierra, posterior a lo cual el tresañero continuó el trayecto de la competencia, respondiendo a su instinto animal.
Lamentablemente, un incidente si se quiere normal, un imponderable, se convirtió en la comidilla de algunos medios de comunicación. La imagen de Bodexpress corriendo sin jinete ha sido mostrada en noticieros de televisión, medios impresos y electrónicos, colocando un hecho negativo por encima de la verdadera noticia: el triunfo de War of Will en el Preakness. Velázquez fue inteligente al responder la primera pregunta del entrevistador de la mejor manera posible. “Antes que nada quiero felicitar a War of Will y a sus conexiones por su brillante carrera en el Preakness.”
Luego el periodista trajo a colación lo ocurrido en el Kentucky Derby (G1). Velázquez fue muy enfático y explicó en términos sencillos su parecer acerca de la decisión. “Hay un reglamento, hubo una infracción, y lamentablemente el caballo fue bien distanciado. Yo estoy claro en ello,” concluyó.
Pero lo peor estaba por venir.
El periodista le preguntó a Velázquez si había que preocuparse por las noticias recientes en el hipismo, mencionando el ejemplar que murió de un infarto el viernes en Pimlico (Congrats Gal en el Miss Preakness S.), y la lesión y sacrificio de otros dos ejemplares en Santa Anita, añadiendo que hay cuestionamientos severos acerca de la seguridad de los caballos de carrera. Visiblemente contrariado, pero sin perder la compostura, el astro de la fusta explicó que se trata de imprevistos propios de la actividad. “Ciertamente colapsó un ejemplar en Pimlico y murió de un infarto. Son cosas que suceden. Cualquier persona puede ir caminando por la calle y sufrir un infarto. No tenía conocimiento de lo ocurrido en Santa Anita, pero de igual manera una lesión puede ocurrirle a cualquier atleta.”
Ninguna actividad deportiva está exenta de esa especie de “lado negativo” que surge por vía accidental. Tristemente, el sensacionalismo de algunos medios de comunicación al difundir noticias negativas sobre las carreras de caballos se ha convertido en un ataque inconsciente hacia la industria hípica y sus protagonistas, y ésta exagerada e innecesaria difusión de tales noticias, sumada al manejo improvisado de las situaciones (caso Santa Anita) termina – entre otras cosas – sirviendo como caldo de cultivo para las acciones destempladas de grupos radicales de proteccionismo animal que obviamente no ayudan en lo más mínimo a nuestro deporte predilecto.