ADIÓS A UN GIGANTE: A.P. INDY MUERE A LOS 31 AÑOS EN LANE’S END FARM
Por Ramon Brito.
Hay eventos que son fácilmente predecibles, pero que nadie quiere que ocurran. Tal es el caso de la muerte del campeón y prolífico semental A.P. Indy, acaecida el viernes 21 de febrero en Lane’s End Farm, en Versailles, Kentucky, donde vivía pensionado desde 2011. Según las primeras informaciones, el inolvidable hijo de Seattle Slew murió tranquilamente en su puesto, en apariencia simplemente víctima de su avanzada edad.
Nacido el 31 de marzo de 1989, el castaño hijo de Weekend Surprise, por Secretariat, corrió 11 veces, defendiendo inicialmente los colores del inversionista japonés Tomonori Tsurumaki, y produciendo $2,979,815 en premios. Ganó ocho carreras – seis de ellas de Grado – y fue Campeón Tresañero y Caballo del Año en 1992. Como dosañero logró el prestigioso Hollywood Futurity (G1) en el desaparecido hipódromo de Hollywood Park. En su campaña como tresañero parecía indetenible en ruta al Kentucky Derby (G1), habiendo ganado el San Rafael Stakes (G2) y el Santa Anita Derby (G1). Sin embargo, una muy pequeña fisura en uno de sus cascos lo dejó fuera de la Carrera de las Rosas. Su entrenador, Neil Drysdale, no quiso correr ningún riesgo con el valioso animal, que luego de un breve descanso volvió a las pistas para ganar el Peter Pan Stakes (G2) y posteriormente brindar una de sus mejores actuaciones al imponerse con autoridad en el Belmont Stakes (G1), demostrando que era el mejor exponente de su generación y dejando entonces el segundo mejor tiempo registrado en la competencia, 2:26.
Luego de un nuevo descanso para completar su recuperación, A.P. Indy falló ruidosamente en el Molson Export Million (G2) en Woodbine. En su siguiente salida, la Jockey Club Gold Cup (G1), se fue de manos en la partida y perdió parte de uno de sus cascos, pese a lo cual pudo llegar tercero detrás de Pleasant Tap y Strike the Gold. Gracias a la utilización de un entonces novedoso material acrílico, el casco fue intervenido con éxito y así el caballo se alistó para su momento de gloria.
A.P. Indy correría por última vez el 31 de octubre de 1992, en la Breeders’ Cup Classic (G1), disputada ese año en Gulfstream Park. Viniendo de atrás debido al acelerado tren de carrera, el campeón pasó de viaje poco antes de la recta final y se impuso sin ser exigido a fondo, en una absoluta muestra de calidad y superioridad.
El paso de A.P. Indy por la cría será recordado por siempre. Dos veces líder semental (2003 y 2006). Diez años consecutivos entre los 10 mejores sementales de Norteamérica. 88 ganadores de Grado y 12 campeones. Un indiscutible mejorador de la cría en los Estados Unidos. De su línea descienden grandes padrillos como Pulpit – padre a su vez del gran Tapit – Bernardini, Malibu Moon y Mineshaft, entre otros.
A.P. Indy fue exaltado al Salón de la Fama del Hipismo en el 2000 junto a Drysdale. Un justo reconocimiento para un campeón en las pistas y un gigante en la reproducción, cuyo legado será imborrable…